La expresión de la semana: ¿de dónde viene decir "dormir la mona"?
Saludos, queridos lectores. Esta semana la expresión es archiconocida por todos, en especial por todos aquellos amigos de la noche y la música a todo volumen de las discotecas, donde el humo, los decibelios y la falta de iluminación se mezclan con litros de alcohol para convertir la noche en pura adrenalina. Algunos se pasan tanto con la susodicha adrenalina que al día siguiente ni siquiera se acuerdan de lo que hicieron la noche anterior. ¡Qué pena, con la que se montó, aquella noche tan emocionante! Pero no pasa nada, que ya sus amigos se encargaron de grabar en vídeo con todo lujo de detalles cada uno de los vergonzosos momentos de acción de la noche. Quizá después de beber algo de agua para quitarnos la sensación estropajosa de la boca y ayudarnos a tragar el analgésico para acallar la batería en que se ha convertido el interior de nuestro cráneo veamos el vídeo. O a lo largo del día, ya si eso, cuando terminemos de dormir la mona. Estamos tan acostumbrados a esta expresión que en