¿Por qué ponemos los árboles de Navidad?

Saludos, queridos lectores. En estas fechas en que ya están decoradas las calles, locales y casas para la Navidad, me vino a la mente una nueva curiosidad. Cuando pensamos en la Navidad, lo primero que se nos viene a la mente es la imagen de un abeto decorado con luces y bolas de colores brillantes, con una estrella dorada en su cúspide. Y, la verdad, es una costumbre bastante extendida a lo largo de Europa, y lleva tanto tiempo con nosotros que ni siquiera lo cuestionamos, pero, ¿desde cuándo lleva con nosotros esta costumbre? ¿Cómo se originó? ¿Es algo simbólico, de algún modo?

Pues bien, ¡vamos a verlo!

El origen del primer árbol de Navidad.

El primer abeto adornado apareció en el siglo VIII en Alemania, y nació como intento de cristianizar una antigua tradición celta. San Bonifacio, que estaba de misión allí, quedó muy impresionado por las costumbres de las gentes, quienes decoraban robles en el solsticio de invierno para consagrarlos al dios Frey, dios del sol. Su copa se decía que representaba el reino de los dioses, mientras que las raíces representaban el reino de los muertos. Uno de estos robles estaba consagrado a Thor, y cada año, durante el solsticio de invierno se le ofrecía un sacrificio: de esta forma, se aseguraba la fertilidad, la regeneración y la vuelta del sol. San Bonifacio, en un intento por cristianizar esta costumbre pagana, ya que no podía erradicarla, taló el árbol delante de todos los presentes, leyó unas palabras del Evangelio, y en el lugar donde antes estuvo el roble, plantó un abeto, que al ser también de hoja perenne y tener una copa alargada, pretendía representar el amor de Dios. 

Al menos, esta es la versión más extendida. Hay otras versiones en las que, milagros mediante, se da a entender que el árbol se manifestó, de alguna manera, como una señal divina. Por ejemplo, se cuenta que San Bonifacio taló el roble y a los pocos días, en el tocón del mismo, brotó un abeto, o que uno de los caballeros de la mesa redonda del Rey Arturo lo encontró mientras buscaba el Santo Grial, en medio de la noche e iluminado con muchas luces pequeñitas. 

El primer abeto de Navidad, sin embargo, no llegó hasta España hasta 1870, cuando el Gran Duque de Sesto Pepe Osorio se casó en segundas nupcias con una mujer rusa llamada Sofía Trubetskaya. Ese año, su palacio, situado en el Paseo del Prado, lucía el primer abeto adornado en suelo español.

La decoración del susodicho árbol, desde luego, tampoco es casual. El que decoró el mismo San Bonifacio estaba cargado de simbolismo, desde el color verde intenso de sus ramas, que representa la vida, hasta las velas (luces led hoy día) que representaban la luz de Dios, manzanas (las actuales bolas de Navidad) como símbolo del pecado y las tentaciones, las girnaldas o lazos, que representan a la familia, y más tardíamente, con origen en Filipinas, la estrella de su cúspide, que recuerda a aquella que guió a los Reyes Magos hasta el portal de Belén. Incluso la fecha en que se suele montar el árbol sin resultar excesivamente temprano coincide con la Inmaculada Concepción, el 8 de diciembre, cuando se supone que nació la Virgen María. Aunque, por supuesto, cada quien lo monta cuando quiere, así, en Filipinas podemos disfrutar de la Navidad desde septiembre hasta el primer domingo de enero.

¿Sabían ustedes este simbolismo del árbol? ¿Ya montaron el suyo? Déjenme saber su opinión y sugerencias a través del apartado de comentarios, que estaré encantada de leerles. 

Y con esto por hoy, ¡hasta la siguiente semana, y felices fiestas!

Webgrafía: Información obtenida de las páginas Pipa y Mima (https://www.pipaymima.com/blog/post/39_cuando-como-y-por-que-ponemos-el-arbol-de-navidad?page_type=0#:~:text=Sin%20embargo%2C%20cuentan%20las%20leyendas,el%20nacimiento%20del%20ni%C3%B1o%20Jes%C3%BAs.), La voz de Galicia (https://www.lavozdegalicia.es/noticia/tendencias/2014/12/05/ponemos-arbol-navidad/00031417799542553728801.htm) y National Geographic (https://historia.nationalgeographic.com.es/a/de-donde-viene-arbol-navidad_9997). Imagen obtenida de Pixabay.

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